El viernes pasado fuimos a visitar la estación experimental de la Fundación Centro de Nuevas Tecnologías del Agua (CENTA) en Carrión de los Céspedes, en Sevilla.
Esta es un centro de investigación que es al mismo tiempo la depuradora del municipio, y ste centro se experimentan distintas técnicas de depuración para pequeñas poblaciones y se comprueba si las tecnologías son funcionales y si se adaptan a nuestro clima.
Nos recibió el coordinador del área de Tecnologías del Agua del CENTA, Juan José Salas, quien nos estuvo explicando las tecnologías durante toda la jornada.
Están especialmente interesados en plantas depuradoras que, aunque requieran mayor superficie de parcela, necesiten poco mantenimiento de equipos, poco consumo eléctrico y poca atención.
Nuestra conclusión fue que, en caso de poblaciones de pocos habitantes y sin problemas de superficie de parcela, la configuración óptima es la siguiente:
- Un desbaste con arqueta de desarenado y reja automática de finos.
- Un tanque Imhoff para pretatamiento, decantación primaria, tratamiento anaeróbico del agua y digestión de fangos.
- Un humedal artifical de flujo vertical.
Nos contaron muchos "secretos" de funcionamiento de los humedales artificiales:
- Que funcionan mucho mejor los de flujo vertical que los de flujo horizontal.
- Que el requisito imprescindible para que no se colmaten y dejen de funcionar es que la alimentación sea INTERMITENTE. La intermitencia añade oxígeno y no deja que proliferen las bacterias que "coagulan".
- Que la vegetación plantada no realiza la depuración, es el biofilm del sustrato el que depura, por lo que las plantas se pueden sustituir por especies más ornamentales.
- Que la superficie necesaria es de algo más de 1 m2 por habitante.
- Que la distribución de agua se hace mejor con tubos a 50 cm sobre el nivel del suelo.
- Que conviene dejar una capa superior de 5 cm de arena fina para que ayude a distribuir el agua por capilaridad.
En caso de que el espacio fuese menor, en vez de usar un humedal artifical se puede usar un lecho bacteriano (filtro percolador) con un pequeño decantador, enviando el fango al tanque Imhoff.
Además nos quedamos con ganas de aprender más sobre depuración anaerobia. Hemos leido que los tanques Imhoff se sustituyen, en aplicaciones más grandes, por reactores RAFA, (Reactor Anaerobio de Flujo Ascendente) o en inglés UASB, que no consumen electricidad, generan metano que se puede aprovechar y producen 1/6 parte de fangos que los sistemas de depuración aerobia. Parece que funcionan mejor con aguas por encima de 20°C y muy cargadas (como las nuestras). En hispanoamérica hay algunas experiencias.